SE ACERCA EL VERANO… ES TIEMPO DE DESCANSAR Y DESCONECTAR

Algo que parece obvio es que HAY QUE DESCANSAR, tener una transición, cargar las “pilas”, buscar una regeneración física y mental, pero… surgen algunas dudas y miedos:

¿Y si paro demasiado tiempo? ¿Y si no descanso lo suficiente?

¿Y si cojo mucho peso? ¿Y si empiezo pronto a meterme “caña”?

¿Por qué parar y no seguir ahora que “estoy fino”?

¿POR QUÉ APARECEN LAS DUDAS?

Los deportistas que siguen un plan de entrenamiento, la práctica de actividad física les genera una adicción al deporte gracias a las betaendorfinas que se liberan con la práctica de éste. Por eso el cuerpo necesita cada vez más dosis de endorfinas y pide más actividad física.

Tras acabar un ciclo de entrenamiento, ES DIFÍCIL PARAR DE GOLPE ya que el organismo experimenta un “síndrome de abstinencia” que demanda actividad. Se niega a parar. Si, además, el deportista acaba de sumar un éxito o un “pico” de forma que no quiere perder, a pesar de no tener competiciones principales a la vista, nuestra cabeza, nuestro cuerpo o ambos no quieren que se pare de entrenar.

¿ES NECESARIO PARAR?

La pregunta sería ¿ES NECESARIO HACER UN PERÍODO DE DESCANSO?, nos referimos a más de una semana o unos días, cuando el deportista se encuentra fatigado.

La respuesta es SÍ, para una recuperación física: regeneración muscular, tendinosa, del balance hormonal, equilibrio bioquímico, etc. Y, para buscar una catarsis psicológica que libere la presión y estrés de los últimos entrenamientos, competiciones… y disfrutar de cosas que, los deportistas muy exigentes se privan, como puede ser el caso de DISFRUTAR DE “COMIDAS PROHIBIDAS”, un premio al trabajo y duro esfuerzo realizado.

¿CÚANTO TIEMPO SE DEBE PARAR?

Ni poco, ni demasiado… Cuando el Papa Julio II encargó a Miguel Angel pintar la bóveda de la Capilla Sixtina, impaciente por verla terminada, le preguntaba: “¿cuándo acabarás?, ante lo que Miguel Angel respondía: “cuando termine”.

¿Cuánto debe durar el período de descanso entre temporadas?, pues LO SUFICIENTE PARA CONSEGUIR UNA RECUPERACIÓN TOTAL.

Este período debe ser de 2 a 4 semanas, dependiendo del nivel del deportista, grado de fatiga, tiempo para la siguiente competición o pico de forma y duración del macrociclo del cual se venga.

Las posibles desadaptaciones en este período no serán excesivas, por lo que SE PODRÁN RECUPERAR EN UN CORTO ESPACIO DE TIEMPO cuando se retorne a los entrenamientos.

Para programar la duración, se puede complementar con pruebas que van desde analíticas, pruebas de esfuerzo, estado de ánimo, una charla, etc.

¿INACTIVIDAD FÍSICA TOTAL?

¿Qué hacer en ella? Descanso total, actividad moderada u otras prácticas deportivas, CASI TODAS LAS OPCIONES SON VÁLIDAS, si atendemos a la heterogeneidad de los deportistas.

Mi sugerencia, una PRIMERA SEMANA continuando con el propio deporte, pero de una forma muy liviana (por debajo del 60%), ayudará a regenerar antes el organismo.

El RESTO DE LAS SEMANAS opcional, desde descanso total hasta realizar otro tipo de deportes. Esta decisión va a depender de cada deportista y de lo que mejor se adapte a sus preferencias; en caso de optar por otros deportes, procurar que la carga no sea extrema o que no provoque lesiones de una actividad a la que no está acostumbrado o por el riesgo de esta.

REGENERACIÓN PSICOLÓGICA Y CONTROL DE HÁBITOS

El cambio de hábitos ayuda a la “regeneración psicológica”, porque se realizan cosas diferentes

que no son frecuentes durante el período de entrenamiento y competición.

Hay que tener en cuenta que UN CAMBIO RADICAL DE HÁBITOS TAMPOCO ES BUENO, simplemente basta con tener un poco de “sentido común” y no llevar nada al extremo.

A nivel de hábitos alimenticios, se pueden ingerir alimentos que en otro momento no sean los más recomendables para el entrenamiento, pero tampoco conviene pasar de una dieta sana a una dita “basura”, unido al descenso de la actividad física y del gasto calórico.